Semana 24 de embarazo

Tu bebé es sensible al frío y al calor de los alimentos que consumes

A partir de la semana 24 de embarazo, tu bebé tiene sensaciones táctiles y es sensible al frío y al calor de los alimentos que consumes. Puede escuchar y vive en un ambiente de vibraciones, por lo cual es el momento para estimular su desarrollo con música y con tu voz, que es el principal sonido en el vientre materno.

Los movimientos de tu bebé son más notorios y fuertes e indican que se encuentra bien. Lo normal es que se mueva al menos diez veces después de cada comida. Si no se mueve o disminuye de manera notoria su ritmo de movimientos, hay que consultar al médico para que defina si necesitas exámenes adicionales para comprobar que el feto está bien; este parámetro se debe tener en cuenta el resto del embarazo. La forma como se controla el bienestar del bebé por parte de la madre es la presencia de movimientos.

Su piel es más gruesa y menos transparente; está cubierta del todo por la vérnix caseosa. Ya son nítidas sus uñas, pestañas y cejas, pero aún continúa sin abrir los ojos, el iris sigue tomando más color. ¿De qué color serán sus ojos?

Ahora estás más corpulenta a medida que crecen el útero, la placenta y el bebé. Puedes tener con mayor frecuencia molestias como dolor de espalda, presión en la pelvis, calambres en las piernas y dolores de cabeza.

Algunos de los problemas comunes que ciertas mujeres experimentan durante el embarazo pueden aliviarse bebiendo agua. Si bebes mucha agua, puedes aliviar los dolores de cabeza, los calambres uterinos y las infecciones urinarias.

El descanso es vital, por eso a partir de aquí y hasta final del embarazo, se sugiere que duermas acostada hacia el lado izquierdo y que, en la medida de las posibilidades, adoptes la llamada posición fetal.